En fisioterapia, el término “terapia combinada” se refiere a la aplicación simultánea de ultrasonidos y corrientes de baja o media frecuencia. Así, la terapia combinada es el tratamiento combinado, simultáneo y sincrónico de la terapia ultrasónica con electroterapia a través de corrientes de baja y media frecuencia. Esta técnica representa un procedimiento de terapia física que difiere de los dos anteriores.
La terapia combinada permite el diagnóstico y el tratamiento de forma rápida, precisa y eficaz. Además, ahorra tiempo debido a que en otro caso tendrían que aplicarse dos técnicas por separado para obtener los efectos de los distintos procedimientos.
Por ello, la combinación de estímulos mecánicos y eléctricos proporcionan efectos diferentes de los aportados por los estímulos aplicados por separado. El tratamiento es más eficaz por ser capaz de estimular al tejido lesionado con los parámetros más adecuados (localización exacta, ángulo de incidencia del haz ultrasónico, relación con la zona de parestesia, correspondencia con las zonas metaméricas, etc.) lo que puede ser terapéuticamente muy deseable.
El procedimiento de terapia combinada favorece la relación fisioterapeuta-paciente y permite al paciente participar activamente en su recuperación, lo que redunda en un tratamiento más interactivo y eficiente.