Es un tratamiento similar al drenaje linfático manual pero realizado con un equipo instrumental específico que genera compresión sobre segmentos corporales, en dirección centrípeta. Se trata de un masaje corporal que produce el drenaje de líquidos desde la periferia de las extremidades superiores o inferiores hasta el pecho o abdomen, ayudando además a eliminar el exceso de sangre acumulada en las venas.

Este tipo de tratamiento y los beneficios derivados de esta técnica deben complementarse con otras terapias como drenaje linfático manual, ejercicios activos, dieta e hidratación equilibrada y medias de compresión.

La aplicación fundamental del drenaje linfático manual terapéutico y de la presoterapia está en el campo de la oncología, para el tratamiento del linfedema, y es tratamiento de elección en el caso de elefantiasis, celulitis, edemas traumáticos o complicaciones linfáticas posteriores a una cirugía. Cada vez es más frecuente encontrar en los hospitales y centros sanitarios una unidad de especialización en drenaje linfático y presoterapia.

No obstante en los últimos años, la técnica de presoterapia se ha incorporado al deporte amateur y profesional, como medio compresivo altamente eficaz en la renovación de sustancias de deshecho presentes en la sangre después de un ejercicio físico intenso. En el mundo deportivo esta técnica es asociada al masaje de descarga manual, con el objetivo de renovar la sangre de los tejidos por sangre “nueva” y oxigenada para mejorar la recuperación muscular. El objetivo final es activar la circulación venosa y linfática para favorecer su paso hacia sistemas superiores y, por tanto, su renovación.