Hidratación en verano
En verano las temperaturas son más altas y pasamos más tiempo al aire libre, por lo que tenemos que beber más agua para mantener un nivel óptimo de hidratación.
Se trata de una práctica primordial para mantener las funciones físicas normales, la termorregulación y el funcionamiento cognitivo normal. Ya que cuando estamos deshidratados podemos ver disminuida nuestra capacidad intelectual, la concentración, el rendimiento físico y la memoria.
Pies hinchados en verano
Es habitual sentir los tobillos y los pies hinchados en las épocas de calor. La causa son las altas temperaturas y una mala circulación sanguínea. Los médicos lo llaman edema periférico y se trata de una acumulación de líquidos en la zona baja de tus piernas. Es más frecuente sufrir este problema cuando se pasa demasiado tiempo de pie o sentado, sin moverse. Si este problema es muy habitual, lo mejor es que consultes a tu médico.